jueves, 19 de agosto de 2010

Sobre la ciencia

Oh, Ciencia!, Ciencia! La deliciosa práctica del conocimiento! Tú dominas al mundo! Que los imbéciles se preocupen por el petróleo!, por la extracción minera!, por el gas!, por subir el tipo de cambio para impulsar las exportaciones! Quienes son ellos, después de todo? Solo necios! Son alguien, acaso?
Oh, Ciencia! los que te persiguen, te encuentran! Los que se deciden por ti, aquellos que miran con desprecio a los abundantes y sucios miserables, preocupados siempre por lo que dice "Bayly", por lo último acontecido en la vida de algún animal recién llegado al zoológico de nuestra (¿digo nuestra? Pobre de mí!) farándula, y por comprar, sin falta, el diario "El Bocón" (su frecuencia es lo único que tiene en común con otros diarios, más respetables, o menos viles), aquellos, digo, que no toleran la extrema vulgaridad de la bajeza encarnada en el pueblo ignorante, sus danzas, su música, y su lenguaje y que, aun así, sacrifican su vida a ti: por ellos!; Aquellos, en fin, como yo, pero sin duda con mayor capacidad e intelecto, que saben que solo tu serás capaz de llenar de luz las cabezas de la lacra a la que honramos cada 5 años, obedeciendo a su ignorancia, y que borrarás de la civilización, que carece en estos tiempos casi por completo de gente civilizada, la oscuridad en que la absurda izquierda y el asqueroso cristianismo la han sumergido, aquellos te hallaran fácilmente!. Ay de mí, que no puedo seguir sus pasos! Mi falta de capacidad y mi poco empeño en mis clases de matemáticas cuando aún iba al colegio son la cadena que me amarra a este barco que se hunde, conmigo en él, al lado de cristianos y comunistas! qué muerte en vida tan indigna! Solo me queda mirar de lejos, con envidia y deseándoles suerte, como "ellos" alcanzan aquello que yo solo puedo soñar: la dominación del espacio, del tiempo y la energía, esto es, del Universo: Convertirse en Dioses!

 

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